Por Joel Pérez
El pasado martes 18 de febrero se reportó la desaparición del menor Esvin Alexander Tomás, en la Aldea San Pedro, Los Amates, Ixcán. Inicialmente se presumía que se trataba de un secuestro y los comunitarios retuvieron a una persona a quien la vinculaban con el caso. Sin embargo, en el transcurso del jueves 19 de enero, autoridades comunitarias junto a la Policía Nacional civil (PNC) descartaron la acusación.
Tras la búsqueda del menor, se le localizó a 500 metros aproximadamente de un riachuelo muy cercano a la aldea, de donde se presume habría caído al agua, y aunque algunos medios de comunicación a nivel nacional afirmaron que se trataba de un secuestro, en una entrevista Alexander Figueroa, jefe de la PNC de Ixcán, y representantes del Ministerio Público (MP) declaró que acudieron al lugar y al constatar lo ocurrido, de forma preliminar, descartaron dicha acusación.
Según las declaraciones del jefe de la PNC la causa de muerte del niño pudo haber sido asfixia por sumersión. El accidente se dio por un posible descuido de sus familiares ya que la madre del menor lo había dejado recomendado debido a que ella tenía dedicarse a cultivar cardamomo.
Tras realizar las investigaciones respectivas finalmente la persona aprehendida fue liberada en la misma comunidad, según afirmó Figueroa. Intentamos contactarnos vía telefónica con el alcalde auxiliar de la aldea pero no se logró comunicación.