Search
Close this search box.

La comunidad Laguna Larga a un mes y 13 días del desplazamiento forzado: una crisis que va en aumento

COMPARTE

Créditos: https://www.centrodemedioslibres.org México
Tiempo de lectura: 10 minutos

Por: Nelton Rivera

“Nosotros no entendemos porqué realizaron el desalojo, porque nunca nos notificaron del desalojo, en la ley hay un procedimiento y nuestra comunidad nunca tuvo comunicación oficial del trámite y de la orden de realizarse ese desalojo, no llegaron a entregar hasta la comunidad Laguna Larga una citación, algún papel o memorial del juzgado, nada”.

Así comenzó Serbelio su testimonio. Él es representante de la comunidad Laguna Larga, la comunidad que fue desplazada de manera forzada por la Policía y el Ejército. El desalojo lo promovió el Consejo Nacional de Áreas Protegidas (Conap) del departamento de Petén y desde el 2 de junio se encuentran dentro de un campamento de refugiados en Campeche, México.

Serbelio Santos Gonzáles perdió todo durante el desalojo. El Ejército quemó su casa, destruyó su trabajadero, mató a sus animales, se comió sus alimentos, con motosierra destruyeron su casa. Luego la quemaron. Lo mismo ocurrió con la totalidad de las familias de la comunidad.

Viajó desde Campeche, recorrió Petén y se trasladó junto con dos compañeros más, Marvin y Miguel Ángel, por la carretera del Atlántico hacia la ciudad capital. En la oficina del bufete de Derechos Humanos, nos reunimos una noche para conversar sobre lo ocurrido en la noche del sábado 2 de junio y la madrugada del día 3.

Saben que el recorrido es largo y peligroso, temen por sus vidas y temen también que puedan ser detenidos de forma arbitraria como le ocurrió a Jovel Tobar, quien fue detenido desde el 28 de marzo y sigue en la cárcel de San Benito Petén. Es otro de los presos políticos del país.

Serbelio quiere denunciar el desplazamiento forzado, lo inhumano que están viviendo las familias. Marvin teme por su comunidad El Reloj porque saben que el Conap y otras personas quieren desplazarlos también y Miguel Ángel ha insisto en denunciar todos los atropellos que se comenten en contra de las comunidades afectadas por los desalojos.

Ya es de noche, han pasado 20 minutos de las seis de la tarde cuando comenzamos esta conversación. Los tres representes comunitarios, a pesar del cansancio, narraron cómo fueron desplazados hacia el territorio mexicano, la destrucción de la comunidad y la crisis humanitaria que actualmente están viviendo.

***

La legalidad de la comunidad

Nuestra comunidad lleva ya un proceso de reconocimiento y legalidad de su establecimiento. El Conap avaló la creación de la comunidad, nos dieron el aval para construir la Iglesia católica, la escuela, la creación y formación  del Comité de Desarrollo Comunitario (Cocode), la auxiliatura y el asentamiento humano. Todos estos convenios: ya estaban las actas firmadas por el Conap, teníamos ya listo el plan pero solamente hacía falta el momento de firmar la permanencia de nuestra comunidad.

Finalmente el Conap no respetó los compromisos que asumieron, ni los documentos que ellos mismos firmaron y respaldaron. Las nuevas autoridades del Conap cambiaron y estas de inmediato se desentendieron de los compromisos institucionales. Este cambio ocurrió en 2008 o 2009.

Las autoridades regionales del Conap en Petén y a nivel Nacional cerraron cualquier espacio de interlocución con la comunidad Laguna Larga, se negaron muchas veces para continuar con los compromisos asumidos por esta institución.

Entonces decidimos buscar una vía legal de diálogo, y nos respondieron todo el tiempo de forma negativa. Cuando fundamos la comunidad, 17 años atrás, el mismo personal del Conap nos confirmó que esa tierra estaba desocupada y que no tenía dueño y que nosotros podíamos asentarnos en esa área. Estamos hablando de 1999.

Por eso muchas familias decidimos establecernos como comunidad sobre ese terreno. Fueron las mismas autoridades del Conap quienes nos indicaron dónde debíamos fundar la comunidad,  y esas mismas personas continúan trabajando dentro del Conap y ahora ellos mismos se contradicen.

El Conap gestiona los desalojos ante la justicia, recurren a la difamación al acusarnos de ser delincuentes, usurpadores o narcotraficantes. En nuestra comunidad hay gente que solo se dedica a trabajar la tierra, a cuidar a sus animalitos y a proteger a sus familias.

***

El desalojo

En el mismo momento que nos iban a desalojar el día viernes 2 de junio corrió la preocupación en la comunidad, hubo mucho temor cuando supimos ya que estaban por desalojarnos. Las familias supimos que el mismo Conap afirmó que ellos iban a ir a desalojar a los “criminales”, que solo gente narcotraficante estábamos aquí en Laguna Larga y que esa era la razón principal del desalojo.

Con semejantes argumentos decidieron enviar a 1400 oficiales de la Policía y el Ejército, con muchas patrullas. Ellos venían completamente armados, con sus armas de grueso calibre, como si fueran a ir a la guerra, como afirmaban.

Y resulta que en la comunidad solo vivimos campesinos pobres, mujeres trabajadoras, no tenemos nada con qué defendernos, solamente tenemos el coraje y valor para defender la vida y a la comunidad. Por eso insistimos en defender nuestros derechos.

Así que realizamos una asamblea comunitaria, conversamos entre todos y decidimos salir de la comunidad, marchar hacia México y atravesar la línea fronteriza, para evitar un conflicto con las fuerzas de seguridad y evitar que hubiera pérdidas de vidas. No nos quedaba otro camino.

Las autoridades mexicanas ya estaban avisadas del desalojo, así que nos aconsejaron que si nos trasladábamos, no íbamos a facilitarles que hicieran un derramamiento de sangre, que nos movilizáramos para que no violentaran a ninguna familia y así lo hicimos. Pero a qué costo: pasamos por bastantes peligros, imagínese así como la selva nos protege y nosotros a ella, tampoco podemos descuidarnos dentro de la selva.

Las autoridades del Conap y del Estado dijeron que iban  a capturar a todas las personas, a desalojar la comunidad, y a quienes se opusieran se los iban a llevar presos. Eso desató el miedo y el temor de la gente, y por eso decidimos movernos.

En Petén en el 82 hubo muchos desplazamientos forzados, llegó el Ejército y arrasó comunidades enteras. Muchas vidas se perdieron de inocentes, la gente tuvo que huir a la sierra dentro de la selva, otras familias tuvieron que desplazarse a territorio mexicano.

Vivimos 15 días de amenazas por el desalojo, dos ancianos de nuestra comunidad murieron por la presión y tensión de la represión. Tres mujeres embarazadas perdieron a sus bebes, otras mujeres embarazadas que también salieron dañadas fueron trasladadas a atenderse en un centro de Candelaria, México. Son aproximadamente ocho mujeres embarazadas que están bajo atención médica ahorita. Muchos niños están siendo tratados, uno de los niños chiquitos se quebró su mano al momento de ver a los soldados y salir corriendo.

La población sufrió mucho cuando vieron que sus casas estaban siendo quemadas por el Ejército. Mientras íbamos caminando a territorio mexicano al mismo tiempo veían la nube de humo, escucharon durante muchas horas las motosierras trabajando, destruyendo sus casas.

Vieron cómo las iban botando, desde el sábado 2 de junio a las siete de la noche comenzó la destrucción de la comunidad. Todo duró hasta la madrugada del domingo 3 de junio. También escucharon muchos disparos, no sabemos si tiraban al aire, o en dirección de la gente, pero comprendemos que también dispararon para matar a nuestros animales, porque no pudimos recoger nada, ni alzar a los animales.

La PNC, el Ejército y el Conap fueron quienes destruyeron las casas de las familias, los cultivos y trabajaderos, fueron ellos quienes mataron a nuestros animales. Las familias dejaron sus animales domésticos, todo se quedó tirado; coches, gallinas, patos, mulas, perros. Nos imaginamos que los mataron.

Las pérdidas de vidas son invaluables, pero las pérdidas económicas también lo son. Cada familia tendrá que calcular cuánto dinero perdió con la destrucción de sus viviendas, las pérdidas de sus cosas de uso doméstico, personales, herramientas de trabajo, sus animalitos, todo.

Por ejemplo los pozos de agua que tanto trabajo costó construir también fueron destruidos,  todo lo derrumbaron, pero si pensamos en una pérdida preliminar entendemos que es una pérdida económica bastante grande. Estamos hablando de 17 años de trabajo de las familias, fueron 107 familias las damnificadas, más o menos 416 habitantes de la comunidad Laguna Larga.

***

Desplazados y refugiados

Nuestras familias están desplazadas en la línea limítrofe entre México y Guatemala. Hay familias que se desintegraron durante la marcha para la línea, algunas salieron en dirección contraria. Hay familias que no se han podido reunir, lo importante para la gente fue huir y aún no se han reencontrado, solamente 416 personas pudimos contabilizar cuando llegamos a México, creemos que hay como 30 personas aún perdidas en la selva.

Tenemos 120 niños en la comunidad. Para toda la comunidad es importante denunciar que se violaron todos nuestros derechos a la vida, los derechos de los niños, y los derechos de las mujeres, lo que queremos es que se haga justicia con los responsables de ese desalojo, no es justo lo que están haciendo con nuestra comunidad.

Queremos regresar a nuestra comunidad. No tenemos adónde ir y estamos luchando por la legalización de esa tierra. México nos está abasteciendo con comida, agua, medicina y protección, contraria a la acción de México, el Gobierno de Guatemala no nos ha brindado ningún tipo de ayuda o auxilio.

Lo más terrible es que el comisionado presidencial para el diálogo, Rocael Cardona, llegó a la línea fronteriza, estuvo en el campamento de refugiados de Campeche, pero no llegaron a asumir ningún compromiso, ni llevaron ningún tipo de apoyo para las familias. Tampoco para responder por la represión del Estado. Llegó también la Procuraduría de los Derechos Humanos (PDH) y Copredeh, llegaron solamente a platicar, pero no mostraron ninguna propuesta para solucionar nuestra problemática.

Las instituciones que llegaron son las de Petén, a excepción de Cardona que “representa” el diálogo a nivel nacional, todo el tiempo hemos estado intentando conversar con ellos. Les llevamos en todo momento información y no nos acompañaron como les corresponde. Tenemos años de plantearles la solución a las comunidades que estamos siendo afectadas en la Sierra Lacandona, Laguna del Tigre y otras, pero no les interesa nuestra situación.

Para nosotros salir desde Campeche y dejar atrás a la familia, a la comunidad es triste, por otro lado seguimos haciendo bastantes gastos para viajar hasta la capital y los riesgos que representan pasar por los caminos y por la criminalización que hacen de nosotros nos complican la vida.

***

Y por los fallecidos nadie responde

El 2 de junio, cuando la comunidad se dio cuenta de que llegaron las fuerzas de seguridad para desalojarnos,  la gente entró en pánico y quedó bajo mucha presión. Antes del desalojo estuvimos bajo mucha presión, dos de los ancianos, a pesar de que estaban bien físicamente, que los veíamos completos, fuertes físicamente,  fallecieron del miedo: don Pablo González González de 71 años y don Pedro Reyes de 63 años. Imagínese que don Pedro en 2012 lo detuvieron los militares en su trabajadero, se lo llevaron a la cárcel cuando tenía 58 años de edad, pero esta vez su corazón no aguantó.

Nosotros hemos denunciado muchas veces cuando el Ejército hace sus operativos dentro del territorio y no pasa absolutamente nada.

***

El papel de las fuerzas de seguridad

El Ejército y la Policía en el Petén, en específico en el caso de las comunidades afectadas, no son bien vistos por la población. Cuando el Ejército hace sus comisiones, por ejemplo cuando acompañan a los trabajadores del Conap a hacer los supuestos monitoreos, siempre van acompañados por el Ejército.

Y cuando encuentran a un campesino trabajando, lo que hacen es amenazarlos, destruirles sus cultivos o los amenazan, y el extremo ha sido que los capturan. Varios han sido capturados. A don Pedro Reyes cuando estaba trabajando en su pepitoria lo capturaron en 2012, después de eso ya no quiso salir de su comunidad.

Este acoso del Ejército mantiene a las personas de las comunidades bajo mucha presión, porque están siempre bajo la amenaza de que cualquier cosa les puede ocurrir. Con los agentes de la policía es menos el problema, llegan solo cuando hay un desalojo que realizar de ahí nunca lo hacen.

Ha habido incidentes con varios oficiales, insisten que no podemos estar en nuestras comunidades, nos acusan de ser delincuentes o taladores de árboles. Nosotros ya le planteamos al Ejército varias veces que  vengan y reunamos a la comunidad y que verifiquen ellos mismos si en  la comunidad hay delincuentes como ellos afirman.

Incluso en una ocasión llegó un oficial del Ejército. La gente llevó las armas que tienen, ellos mismos se dieron cuenta de que en las comunidades no hay delincuentes y que la gente tiene uno que otro rifle 22 para cazar, incluso rifles oxidados y viejos, nada que ver con el armamento que ellos afirman que tenemos.

Regresando al 2 de junio, la comunidad Laguna Larga lo que hizo cuando vieron que el Ejército llegó: optamos por marcharnos y buscar refugio en el lado mexicano, pero por las mentiras que dicen en la capital, sobre que somos narcotraficantes por ejemplo, creen que van a ir a la guerra, que habrá un ejército armado esperándolos.

Marvin tomó la palabra: “en el caso de un desalojo en contra de la comunidad El Reloj, la gente sabe que debe de retirarse para evitar que suceda una tragedia, por eso viajamos a la capital para demandar justicia, para que cese la violencia y los desplazamientos forzados de nuestra gente, porque en realidad queremos que se respeten nuestros derechos humanos”.

 

***

No tenemos acercamiento con las autoridades

Serbelio sigue comentando qué sucedió con la comunidad: “mire cuando llegaron los de la PDH, Copredeh y Rocael Cardona las mujeres exigieron ir a ver las casas.

Amílcar Calel no quería que las mujeres fueran a ver sus casas, insistía que no habían destruido nada, que el mismo había ido al lugar y que había tomado fotos, ‘sus casitas ahí están, nadie las está destruyendo, yo les tomé fotos quieren ver’, sacó el celular y mostró fotos de las iglesias que estaban intactas, incluso limpias las tenían, pero con las iglesias no se quisieron meter, Calel sabemos que es funcionario de la Secretaria de Asuntos Agrarios, las mujeres insistieron que esas no eran las casas.

Calel afirmó que no habían tocado las casas, Cardona les dijo a las mujeres que fueran a ver, y las mujeres luego se dieron cuenta de que todo lo habían destruido, que las casas sí las habían quemado.

Vea cómo actúan, Copredeh llego hasta Campeche, se reunieron con las autoridades mexicanas y afirmaron que en la comunidad todo se había respetado y que nada habían tocado las autoridades. Mintieron, porque sabemos que el Ejército, la Policía y el Conap en horas de la noche realizaron la destrucción de la comunidad.

La gente ya había denunciado que vieron lo que estaban haciendo el Ejército y la Policía en la comunidad, escuchamos los disparos, vimos el humo de las casas y las autoridades gubernamentales lo negaron y ocultaron”.

“La PDH en Santa Elena Petén sí informó qué se hizo el 3 de junio, entre el mediodía y la una de la tarde, informaron que llegó el juez y que este entregó al Conap todo lo que estaba en la comunidad, hasta ahí llego el informe”. Miguel Ángel tumo la palabra nos comentó sobre el informe de la procuraduría.

Serbelio continuó con su  narración: “vea, la población vio el fuego el sábado 2 de junio desde las primeras horas de la noche, más o menos a las siete, el fuego duró hasta el amanecer del domingo 3 de junio.

El juez Sharon Emilio Orozco López es quien emitió las órdenes de desalojo y es el mismo juez que las modifico ahora posponiendo unos días el desalojo de la comunidad La Mestiza. Este señor es el juez de Paz de San Andrés Peten.

***

La conversación con Serbelio, Marvin y Miguel Ángel duró un poco más de una hora y media, se estaban preparando para salir a cenar porque su jornada había sido extenuante y en el campo se cena temprano, se madruga para ir al trabajadero todos los días  y la dinámica en la ciudad lo cambia todo.

Miguel Ángel tiene experiencia dando conferencias de prensa, le ha tocado dar muchas en estos últimos dos años. Marvin y Serbelio se caracterizan por tener total serenidad para relatar una parte de los atropellos que el Estado esté cometiendo en contra de ellos, sus familias y las dos comunidades a las que representan.

***

Más campamentos de refugiados en el mundo

La comunidad Laguna Larga cumplió un mes y 13 días de haber sido desplazada y buscar el refugio en el territorio mexicano. Contrario a esta crisis humanitaria como la calificó el abogado Ramón Cadena, el Gobierno de Guatemala insiste en realizar más desalojos, en la lista está la comunidad La Mestiza, El Reloj y otras.

Sabemos de los casos de desplazados que está viviendo Europa, de los campamentos de refugiados de la frontera entre Turquía y Siria producto de la invasión de occidente a esta zona, disfrazada de Estado Islámico (EI), los mismo está ocurriendo con refugiados en Jordania, Líbano. (National Geographic. Cinco cosas que aprendí en un campamento de refugiados en Siria).

Está el campo de refugiados de Lavrio en Grecia, que alberga a familias sirias y afganas que huyeron de las guerras (El País. Cómo es vivir en uno de los mejores campos de refugiados en Grecia). Están también los campos de refugiados de  Dadaab en Kenia, considerado el mayor campo de refugiados del mundo con  245 mil 126 somalíes expulsados por la guerra.

El campo de refugiados de  Dollo Ado en Etiopía, Kakuma en Kenia, Jabalia en Gaza, Al Zaatari en Jordania, Katumba en Tanzania, Pugnido en Etiopía, Panian en Pakistán, Mishamo en Tanzania, Yida en Sudán del Sur (El País. Los 10 mayores campos de refugiados del mundo), existen otros de menores dimensiones pero el más reciente es el de Campeche México, resultado del desplazamiento forzado de las familias guatemaltecas de la comunidad Laguna Larga Petén.

 

 

COMPARTE