Créditos: Franci Pereira
Tiempo de lectura: 3 minutos

Por: Rony Morales

Fotografías: Franci Pereira

Para las Naciones Unidas la desaparición forzada es una estrategia que se usa constantemente para generalizar el miedo y el terror de la población. Los efectos ocasionados por esa práctica no se limitan a la persona desaparecida, ni a la familia y círculo más cercano, sino que busca afectar de forma directa a la comunidad y  sociedad en su conjunto.

En Cobán este  21 de junio varios miembros de ciudadanía de las Verapaces conmemoran y siguen con la búsqueda de sus familiares desaparecidos. Comentan que  es importante que Guatemala conozca estos hechos y a los comunicadores comunitarios  les permite entender, luego del proceso de investigación, los múltiples delitos cometidos durante el conflicto armado en Guatemala,  haciendo una aproximación de la barbarie cometida por el Estado y sus fuerzas de seguridad desde 1962 hasta 1996. Según el informe  de Guatemala Memoria del Silencio, una de las consecuencias principales del Conflicto Armado Interno (CAI)  radica en  el número de víctimas.

En el marco de la conmemoración del Día Nacional contra la Desaparición Forzada, la Alianza Departamental de Sobrevivientes del Conflicto Armado Interno, familiares víctimas y organizaciones de apoyo, hacen la invitación a toda la población de Alta Verapaz para realizar un foro- conversatorio donde relatan lo que ha sucedió durante esos años y lo que las familias han pasado exigiendo justicia para sus familiares desaparecidos.

“A finales del ochenta y uno, recuerdo que llegó con los mozos colonos de la finca, Ricardo Sapper de descendencia alemana  a amenazarnos, a decirnos que nos daban tres días para salir de nuestras casas; entonces las familias  no entendíamos por qué, y en grupo decidimos salir de nuestros terrenos  para salvarnos la vida refugiándonos en la montaña, fuimos desalojados del área donde habitábamos por miembros del ejército y trabajadores del finquero, en ese momento conocí lo que era un soldado, ya que nunca en mi vida había visto uno. Éramos niños en ese tiempo.

De la montaña bajamos por necesidad a vivir a Campur  y por buscar donde sembrar nuestros cultivos fuimos caminando por más de dos días a Chisec al no encontrar donde sembrar, tuvimos que  regresar  a pie para llegar a Campur. Fue cuando  logramos un poco de café y cardamomo, durante esa semana fue que se dieron cuenta los miembros del ejército y comisionados militares   que nosotros habíamos regresado y de nuevo nos empezaron a buscar. Como decía, mi familia estaba catalogada como uno de los que estaban impulsando la lucha social”.

Los pobladores han resaltado la importancia de plasmar las desapariciones forzadas a través talleres, foros, fotografías, mantas vinílicas, memoria, escritos y   la historia a través de un mural. Sin embargo algunas personas susceptibles al tema del Conflicto Armado Interno no estaban de acuerdo con estas imágenes como sucede en San Cristóbal, Alta Verapaz.

Los murales son un espacio para la difusión de la cultura de una forma figurativa, impulsando visualmente la historia del pueblo. Esto se realiza de forma colectiva en consenso, la participación de los diferentes grupos de niños, niñas, adolescentes y adultos ha sido importante, ya que a través de estos murales las personas pueden expresar y canalizar sus emociones.

Este proceso de formación permitió ordenar la historia a través de los bosquejos elaborados por los jóvenes, se puede observar en una parte del mismo, como los jóvenes expresaron su sentir acerca del CAI y como el ejército masacró a diferentes aldeas del municipio.

Para los organizadores  es importante comprender que los familiares de las víctimas localizadas en CREOMPAZ, Cobán, Alta Verapaz, estén solicitando justicia porque quieren saber qué fue lo que sucedió con sus familiares. Consideran que estos días son importantes para que la población conozca la historia y se esclarezca lo sucedido, ha sido muy valioso lo que  han aportado para que las personas se expresen con libertad pero sobre todo, que la historia no se olvide.

 

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