Estados Unidos y China hacen una tregua comercial y reducen aranceles

COMPARTE

Créditos: Diseño sin título (2)
Tiempo de lectura: 3 minutos

 

Una reunión en Ginebra durante el fin de semana definió una pausa a los aranceles que se habían impuesto entre los dos países. Los vaticinios son que la economía global ahora tendrá expectativas de crecimiento y podrán seguir negociando los países hasta acordar un impuesto para algunos productos.

Prensa Comunitaria*

Las dos economías más grandes del mundo han puesto una pausa a la guerra arancelaria. Estados Unidos y China llegaron a un acuerdo para reducir los aranceles por 90 días a partir del 14 de mayo.

El secretario del Tesoro estadounidense, Scott Bessent, declaró que ambos países reducirán sus aranceles. Estados Unidos reducirá de 145% a 30 % mientras que Beijing respondió que de 125% se bajarán a 10% para algunos productos.

El anuncio se produjo tras las conversaciones que los dos países han mantenido en Ginebra durante este fin de semana, las primeras desde que el presidente estadounidense, Donald Trump, impusiera fuertes aranceles a las importaciones chinas.

Los impuestos amenazan la economía global con una recesión mundial. Este lunes después del anuncio los mercados financieros repuntaron con números positivos de crecimiento.

Sin embargo, las medidas estadounidenses aún incluyen un componente adicional destinado a presionar a Pekín para que haga más por frenar el comercio ilegal de fentanilo, una potente droga opiácea.

La imposición de los aranceles había hecho temer un desplome del comercio entre los dos países, y los puertos estadounidenses registraron un fuerte descenso en el número de buques procedentes de China.

Crédito: imagen de uso libre.

Con menos producción en las fábricas

Beijing, por aparte, está cada vez más preocupada por el impacto de los aranceles en su economía. La producción de las fábricas ya se ha frenado y algunas empresas se han visto obligadas a despedir a trabajadores debido a la paralización de las líneas de producción de mercancías con destino a Estados Unidos.

“El consenso de ambas delegaciones este fin de semana es que ninguna de las partes quiere un desacoplamiento”, dijo Bessent al anunciar el acuerdo.

“Lo que había ocurrido con estos aranceles tan elevados era el equivalente a un embargo, y ninguna de las partes quiere eso. Queremos comercio, queremos un comercio más equilibrado, y creo que ambas partes se han comprometido a conseguirlo”, agregó el funcionario estadounidense.

El ministerio de Comercio chino declaró que el acuerdo alcanzado con EE.UU. es un paso importante para “resolver las diferencias” y “sentar las bases para salvar las diferencias y profundizar en la cooperación”.

Las futuras conversaciones podrán celebrarse en China o en Estados Unidos, añade el comunicado.
Los dos países reconocen la “importancia de su relación económica y comercial bilateral para ambos países y para la economía global”.

Mejores condiciones para la economía global

El acuerdo es temporal, pero Estados Unidos y China seguirán negociando a fin de reducir sus aranceles generales al 10%, aunque Washington mantiene excepciones a sectores específicos, como el aluminio, el acero o los automóviles, entre otros productos.

Estados Unidos y China establecerán un mecanismo de consulta para continuar las discusiones, que no serán únicamente comerciales, sino que abordarán temas relacionados con la economía en general.

Los equipos negociadores estarán liderados por el viceprimer ministro He Linfeng, de parte de China y, por Estados Unidos, el secretario del Tesoro, Scott Bessent, y el alto representante comercial, Jamieson Greer, asumiendo en los próximos meses el mismo rol que jugaron este fin de semana en Ginebra.

La fecha de la próxima reunión todavía no se ha acordado, ni el lugar. La idea es que se alternen entre Beijing y Washington, pero ambos podrían elegir un tercer país.

El sitio especializado investig.com reportó que entre los efectos que tuvo el anuncio de la tregua comercial es que el dólar subió de precio y el vaticinio es de una recesión se disipó.

“Este anuncio supera nuestras expectativas y es mejor de lo que el mercado habría predicho en marzo”, dijeron estrategas de Deutsche Bank en una nota a sus clientes.

“Podría decirse que este es el mejor resultado que China podría haber esperado: que Estados Unidos diera marcha atrás”, declaró Trey McArver, cofundador de la firma de investigación Trivium China. “De ahora en adelante, esto le dará a China la confianza de que tiene influencia sobre Estados Unidos en cualquier negociación”.

En el caso de Latinoamérica sigue lidiando con un 10% de arancel para todos los productos que son enviados a Estados Unidos.

*Con información de la BBC Mundo, El Clarín, El Financiero de México

COMPARTE