Una licitación de Q5.33 millones, durante la administración de Alejandro Giammattei, dejó en evidencia que, una vez más, la Unidad Ejecutora de Conservación Vial (Covial) cometió irregularidades en la contratación y uno de sus colaboradores aseguró que los trabajos se planificaron sin conocer fehacientemente cuál era el estado de las rutas.
Por Cristian García
Las labores de mantenimiento de carreteras se programaron con los “ojos cerrados”, según Édgar Rolando Marizuya Telón, quien es el coordinador del Departamento de Infraestructura y Tecnología de Covial.
En una declaración hecha a la Contraloría General de Cuentas (CGC), manifestó las deficiencias con las que se trabajó para atender las rutas del país, prácticamente sin tener certeza de las condiciones en la que se encontraban las mismas.
Lo anterior quedó registrado y demostrado en un informe de auditoría divulgado este año por el ente fiscalizador, en el que se evaluaron varios proyectos. Uno de estos fue contratado para reparar caminos de terracería.
El acuerdo para intervenirlos se firmó con la empresa Maga Construcciones, en 2022. En este se estableció que la compañía recibiría Q5.33 millones por trabajar en cuatro tramos de tierra que se encuentran en Santa Rosa y Escuintla.
Sin embargo, en el listado de vías que se le asignó, se incluyó una de diez kilómetros que va del parcelamiento Güiscoyol al centro de Iztapa, que para la fecha en la se hizo la contratación ya estaba pavimentada en su totalidad.
Incluso, la carretera se encontraba en buen estado. Por eso, Covial expuso que en ese lugar no era necesario realizar ninguno de los trabajos que se le había requerido a la entidad mercantil.
Ante esa situación, la dependencia estatal decidió invertir en otra ruta el monto destinado para este camino. Sin embargo, para la Contraloría, este hecho representó una inadecuada planificación.
“El riesgo es que se contraten proyectos con tramos que no corresponden al tipo de mantenimiento, elevando costos”, dijo la CGC, que sancionó por este error a dos trabajadores de la cartera de Comunicaciones con una multa compartida de Q9,312.
Entre ellos está Marizuya Telón, cuyo departamento es el encargado de tener actualizado el estado en el que se encuentra la red vial nacional. No obstante, expresó que al momento en que se planificó este proyecto, “se tenía conocimiento de que el tramo era de terracería”.
Además, mencionó que esa unidad de Covial no tiene personal de campo y “únicamente se trabaja en oficina”. “De acuerdo a lo que nos informan los supervisores regionales, es que se logra actualizar el tipo de rodadura de cada una de las rutas”, acotó.
“Se están programando (proyectos) con los ojos cerrados, ya que se planifica (conforme) lo que terceros visualizan en campo”, recalcó. Por eso, dijo que “todos los años” se les indica “a las autoridades” la importancia de que su departamento tenga personal de a pie.