El gobierno norteamericano afronta la falta de asignación presupuestaria para las dependencias e instituciones federales, pero las autoridades advirtieron que seguirán trabajando en resguardar las fronteras del ingreso de migración irregular.
Por Rony Ríos
La falta de consensos en el Congreso de Estados Unidos ha impedido la asignación del presupuesto al Gobierno Federal. Según varios medios estadounidenses, la propia Casa Blanca informó a algunas instituciones que se preparen a suspender funciones porque el presupuesto con el que cuentan se acabará mañana (30 de septiembre).
Esta información estaría siendo utilizada por los traficantes de migrantes o coyotes como bandera para incentivar la migración irregular hacia Estados Unidos. Los coyotes están propagando información en la que aseguran que el gobierno federal se quedará sin presupuesto y los trabajadores fronterizos no estarán laborando, y que sería el momento idóneo para ingresar al país de forma irregular.
Sin embargo, el subsecretario de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Blas Núñez Neto, y la jefa de la Patrulla Fronteriza, Gloria Chávez, en una conferencia de prensa aseguraron que la Guardia Costera, la Patrulla Fronteriza, el Departamento de Seguridad Nacional y todas las dependencias relacionadas al resguardo de las fronteras continuará trabajando.
Chávez enfatizó: “aunque sea sin salario nosotros seguiremos trabajando para cuidar los más de 300 puntos fronterizos”.
Asimismo, Núñez Neto recomendó a quienes migren a acogerse a los programas de migración ordenada que mantienen vigentes, porque si una persona ingresa de forma irregular no contará con permisos de trabajo y al momento de ser detenido será expulsado inmediatamente del país; aunado a esas consecuencias, las personas ya no podrán optar a los programas que sí conceden permisos de trabajo y acceso a todos los servicios.
Según el New York Times, esta sería la vigésima primera ocasión en la que Estados Unidos cerrará el gobierno Federal. “En el peor de los casos, la Casa Blanca contempla la posibilidad de que se repita el cierre más largo y reciente que empezó a finales de diciembre de 2018 y, durante 34 días, dejó sin salario a unos 800 mil de los 2.1 millones de empleados del gobierno federal”, informó el medio.
