Créditos: Prensa Comunitaria
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“Cuando vienen las elecciones, cada cuatro años, la gente se divide. Vienen los partidos políticos y dividen a la gente; ese es el problema. Nosotros nos quedamos siempre en la lucha. La lucha social no tiene fin, hasta cuando uno se cansa o se muere, ahí se queda. Las participaciones electorales son cada cuatro años, son unos meses nada más, pasan”. Domingo Baltazar

Por Santiago Bastos

Hace muchos años que don Domingo Baltazar empezó a participar en las luchas del pueblo de Santa Eulalia, formando parte de diferentes espacios y proyectos, que han incluido varias veces su participación en la corporación municipal de su localidad. Por oponerse a las hidroeléctricas en el territorio Q’anjob’al, fue acusado falsamente y estuvo preso varios meses, junto a Rigoberto Juárez y otras autoridades comunitarias Q’anjob’al, mestizas y Chuj enviadas a la ciudad de Guatemala o que permanecieron en prisión en Huehuetenango.

En estas elecciones se presentaba por el Movimiento para la Liberación de los Pueblos (MLP) de nuevo a la municipalidad de Santa Eulalia, pero las medidas arbitrarias que siguen en su contra lo dejaron fuera de la contienda. Domingo Baltazar asegura que tras la criminalización que vivió en 2016 sus antecedentes quedaron manchados. Eso les rebotó la inscripción de su planilla. Al ser consultado el portal del TSE muestra que MLP únicamente gestionó once candidaturas para ese departamento, pero no existe registro de la planilla municipal de Santa Eulalia.

Foto por Santiago Bastos

Don Domingo, usted ya ha formado pate de la Municipalidad de Santa Eulalia

Sí, yo ya estuve en la municipalidad, de 2004 al 2008, fui primer concejal y siempre apoyamos a nuestros compañeros que estaban a la defensa del territorio. En el periodo de nosotros, cuando vinieron las empresas mineras, quisieron explotar minas y estuvimos luchando hasta que se hizo la consulta. El alcalde siempre estuvo a favor de las empresas y yo, como primer concejal, a favor de la defensa del territorio, y como la mayoría de los que integran el concejo estaban a mi favor, entonces tuvimos un choque con el alcalde.

Por eso, cuando se hizo la consulta, como la mayoría del concejo apoyaba, no batallamos con los compañeros que integran la coordinación de la defensa del territorio. Salimos a las comunidades y apoyamos y cuando se hizo la consulta, todo salió bien. Fueron 18 mil y tanto que votaron a favor de la consulta. Después de la consulta del 29 de agosto de 2006 empezó ya la resistencia, siempre la gente apoyaba la resistencia. Desde ese año, a todos los alcaldes que han llegado siempre les hemos visitado en la municipalidad y hemos pedido que ratifiquen la consulta cada cuatro años.

Y por estar defendiendo el territorio los metieron a la cárcel, ¿eso le da miedo a la gente?

Usted ya sabe que cuando estuvimos en el debate del Tribunal, se aclaró que yo no estuve, ni nada. ¿Por qué me incluyeron a mí en el proceso? Les dije que me llevaba mal con el alcalde Diego Marcos, cuando estuvimos en la muni como Comisión de Finanzas, siempre chocábamos con él. Él quería agarrar todo el dinero, pero nosotros le dijimos “eso no”; siempre me traía coraje.

Entonces, en 2015 fue cuando capturaron a los compañeros de Yichk’isis (una aldea en resistencia contra las hidroeléctricas en la zona fronteriza de San Mateo Ixtatán), como el alcalde sabe que estamos en el mismo grupo de la defensa del territorio, él trató de meterme en el proceso, fue el alcalde el que nos acusó a todo el grupo. Estuvimos presos año y cuatro meses, gracias a Dios ni siente uno cómo se pasa el tiempo.

Antes de la cárcel, en 2015, ya teníamos esa idea de participar con Winaq, Convergencia, URNG, queríamos. Tuvimos dos reuniones, discutíamos por una planilla entre las organizaciones políticas para formar una alianza municipal, teníamos el plan en eso. Entonces, logramos hacer un acuerdo para formar una planilla aquí en Santa Eulalia. Pero nos metieron a la cárcel y ya.

¿Y después se volvió a presentarse de candidato para alcalde?

No, hace cuatro años no. No hubo planillas, hasta esta vez que sí iba a participar con el MLP. Yo también participo en el Consejo del Pueblo Maya (CPO), que hizo una alianza con el MLP para apoyar a Thelma Cabrera a la presidencia. Entonces, por eso, esta vez, aquí en Santa Eulalia, como hay un grupito, los CODECA y los CPO nos unimos por una planilla.

Pero las mismas situaciones que hay en Guatemala, no nos dejan inscribir a la candidata Thelma y hay problemas en todos lados, quieren controlar a todos los candidatos, a diputados, municipales.

Yo iba a participar, pero por las mismas situaciones que han pasado, de la cárcel y cosas de esas, hay antecedentes policiacos, ahí dice que todavía hay algunas cosas pendientes. Dicen “no hay nada, pero lo que pasa es que para que se borre todo en el sistema lleva un trámite, tiene usted que buscar abogados y lleva tiempo”. Cuando comenzamos a entrar como candidatos, le dije a los del equipo jurídico del MLP, pero no se logró obtener el documento. Se quedó toda la planilla fuera porque cuatro de los que formábamos la planilla teníamos el mismo problema, de antecedentes policiacos.

Son cosas del sistema que manejan los oligárquicos, lo tienen controlado todo, no nos quieren ver a nosotros como mayas indígenas. Cuando uno quiere gobernar a su pueblo, a su país, se buscan pretextos para eliminarlos; es lo que pasó en mi caso. ¿Por qué no dejan inscribir a Thelma Cabrera? Thelma Cabrera es una defensora de derechos humanos, ha luchado y yo creo que no tiene delitos. No la aceptan ¿por qué? A los criminales ¿por qué sí los aceptan? Hablamos de gente que sí tienen delitos, han ido a la cárcel por corrupción, narcotráfico. Ahora dicen que van a ser diputados.

La gente no entiende, siguen apoyando a los partidos de ellos. La otra cosa es que la gente está muy engañada por el mismo sistema de los ricos. Entonces, sólo con dinero, donde hay clientes pues, la gente va y si no hay nada, la gente no te hace caso. Todavía nos falta entender, no sé que técnica se tiene que usar para que la gente no vote a favor de los ricos.

Y ¿Cuál era el plan que tenían como como planilla municipal? ¿en qué se diferenciaban ustedes de otras planillas?

Nosotros, como organizaciones sociales de Santa Eulalia, como movimiento social, como Gobierno Plurinacional tenemos propuestas porque sabemos que vivimos en un país de corrupción. El mismo plan maneja el MLP. Una es evitar la corrupción y proyectos sobrevalorados. Los candidatos gastan millones y millones en sus campañas y ya ganando las elecciones, tienen que recuperar su dinero, más sus ganancias. Es el negocio ¿verdad? Esto no nos conviene, la idea es buscar las formas de cómo evitar la corrupción, hacer proyectos administrativos, ya no por contratos. Y el problema de la luz, por ejemplo, Energuate son empresas privadas, cobran lo que quieren, pero los que salen afectados son los usuarios, pagan mucha luz. La idea que tenemos es promover una planta hidroeléctrica municipal o comunitaria.

Usted, con su larga trayectoria como parte del movimiento social y la defensa del territorio, ¿Cómo considera que debe ser el trabajo del alcalde?

A veces los alcaldes también dividen a la gente por intereses. En mi caso, si yo ganara las elecciones, mi idea es pensar la forma de unir a todas las autoridades comunitarias: los COCODE, alcaldes auxiliares, organizaciones sociales para no darle lugar a los empresarios; quieren poner sus empresas en nuestro territorio.

Cuando vienen las elecciones, cada cuatro años, la gente se divide. Vienen los partidos políticos y dividen a la gente; ese es el problema. Nos quedamos siempre en la lucha. La lucha social no tiene fin, hasta cuando uno se cansa o se muere, ahí se queda. Las participaciones electorales son cada cuatro años, son unos meses nada más, y pasan. Lo electoral es parte de toda la lucha. La lucha que tenemos, la resistencia en favor del territorio, no tiene termino, siempre sigue. Pero no sólo es luchar, nuestra meta es también quitar el poder a los que gobiernan el país ahora y, entonces, también podremos gobernar como gente maya, indígena. Hay que aprovechar las ilusiones para llevar a nuestra gente a la presidencia, a diputados, o a las alcaldías. Esa es nuestra lucha, pero como le digo, es cuestión de cada cuatro años. Ahora, la lucha de acá es de siempre, esta lucha sigue.

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