Por CIJ
26 de junio del 2019
La Comisión Internacional de Juristas (CIJ) lamenta que el Presidente de la República haya nombrado al Coronel de Infantería DEM Juan Chiroy Sal, como Inspector General del Ejército de Guatemala. El Presidente de la República parece ignorar que el coronel Chiroy Sal está acusado de ser autor de la llamada Masacre de Alaska (octubre de 2012), acto criminal en contra de la manifestación pacífica llevada a cabo por los 48 Cantones de Totonicapán y autoridades ancestrales de dicho departamento, que terminó con la vida de seis personas y dejó heridas a aproximadamente 34 personas más.
En el pasado, ya la jueza Claudette Domínguez (jueza de Mayor Riesgo señalada de favorecer con sus resoluciones a militares), lo benefició al otorgarle medida sustitutiva, a pesar de que se trata de un hecho gravísimo según el Derecho Internacional, calificado como ejecución extrajudicial; además, gracias a dicha jueza, el Coronel de Infantería DEM está siendo procesado por el delito de homicidio en ocasión violenta, en lugar de ser procesado por el delito de ejecución extrajudicial, que es un delito mucho más grave. Y ahora el Presidente de la República Jimmy Morales, en un nuevo acto de impunidad, lo premia nombrándolo como Inspector General del Ejército.
Según los estándares internacionales, todo Estado debe tomar medidas concretas en contra de la impunidad. El Presidente de la República, al beneficiar al coronel Chiroy Sal con este nombramiento, está contraviniendo este principio. Y además, viola el artículo 113 de la Constitución Política de la República de Guatemala, que si bien reconoce que todo guatemalteco puede optar a un cargo público, también establece que su nombramiento y la decisión de elegirlo debe tener “razones fundadas en méritos de capacidad, idoneidad y honradez”.
Preocupa hondamente a la Comisión Internacional de Juristas, el nombramiento como Inspector General del Ejército, de una persona que carece de méritos de capacidad, idoneidad y honradez. Preocupa además, que con dicho nombramiento, el Coronel Chiroy Sal adquiera más “poder” y más “fuerza”, derivada de dicha posición y que le permitiría con más facilidad, llevar a cabo futuros actos de amenazas en contra de las víctimas, sus abogados, abogadas, querellantes adhesivos, familiares o bien implementar más presiones para provocar más impunidad.