Por Cristina Chiquin
Foto-Reportaje
La audiencia del juicio por Genocidio y delitos contra los deberes de Humanidad en contra de Efraín Ríos Montt y Mauricio Rodríguez Sánchez, siguió su curso el 10 de mayo. José Rodríguez Sánchez, ex jefe de inteligencia en los años de 1982 y 1983, dio su declaración ante el tribunal.
Sánchez, a pesar de estar siendo sindicado en el proceso, ha tenido un bajo perfil a nivel mediático y político; al igual que Efraín Ríos Montt, negó tener responsabilidades en los cargos que le imputan.
“Yo fui miembro del Estado Mayor del Ejército como director de inteligencia; mí puesto era asesoría, yo puedo ser asesor de una empresa, asesorar una barrabasada como le puedo asesorar una brillantez, está en él si lo toma en cuenta o no y así era mi cargo en el Estado Mayor del Ejército”
De esta manera el acusado dejó ver sus responsabilidades durante el periodo mencionado, negó la línea de mando y, nuevamente, aseveró haber tenido únicamente un papel de asesoría y pidió que se le dejará en libertad, aduciendo inocencia.
Posterior a ello, el tribunal de Mayor Riesgo A, presidido por la Jueza Iris Jazmín Barrios, cerró el debate, y se retiro a deliberar para luego emitir la sentencia
La sala de audiencia, desde el receso a las 9.00 de la mañana hasta las 4:00 de la tarde cuando nuevamente dio inicio la audiencia para dar la sentencia, estuvo llena. En los rostros de las y los presentes se notaban muchas emociones, esperanza, tristeza, alegría, incertidumbre.
“De esta forma el tribunal ha cumplido con su deber de dictar sentencia”
La jueza Jazmín Barrios, junto a los jueces Patricia Bustamante y Pablo Xitumul, iniciaron la sesión a la hora establecida. Barrios empezó diciendo que daría la sentencia en forma breve y resumida debido a que el tribunal sabía que la jornada había sido larga.
A pesar de los intentos de la defensa de seguir interrumpiendo el proceso el tribunal dio inició a la lectura de la sentencia que declaró a Efraín Ríos Montt culpable por los delitos de Genocidio y delitos contra los deberes de humanidad y se absolvió a José Rodríguez Sánchez por considerar que este no tuvo injerencias en las operaciones contra el pueblo Ixil.
El tribunal también ordenó al Ministerio Público seguir la investigación en contra de las demás personas que pudieron haber participado en los hechos que se juzgaron.
El tribunal se pronuncio de esta manera:
“El acusado, José Efraín Ríos Montt, es responsable del delito de Genocidio como autor, cometido contra la vida e integridad de los pobladores civiles en Santa María Nebaj, San Juan Cotzal y San Gaspar Chajul, por tal delito se le impone la pena de 50 años de prisión inconmutable. Es responsable, como autor, de los delitos contra los deberes de humanidad por tal delito se le impone la pena de 30 años de presión inconmutables”
Con respecto a Rodríguez Sánchez el tribunal dijo:
“Se absuelve al acusado José Rodríguez Sánchez de los delitos de Genocidio y delitos contra los deberes de humanidad”
Por otro lado se quitaron las medidas sustitutivas que gozaba el acusado Efraín Ríos Montt y se ordenó su inmediata detención y su ingreso a prisión en el cuartel militar de Matamoros que funciona como presión preventiva, suspendiéndole de sus derechos políticos durante el tiempo que dure la condena.
De esta manera Efraín Ríos Montt, de 86 años, fue senteciado a 80 años de prisión inconmutables por ser el autor del asesinato de 1,771 indígenas Ixiles a manos del ejército, durante el periodo de 1982 y 1983. Los crímenes fueron perpetrados en el marco de la guerra interna de 36 años.
Dentro de la sentencia dictada, el tribunal resaltó los peritajes, testimonios sobre violencia sexual y la prueba documental en la cual están los planes de operación Sofía, Victoria 82 y Firmeza 83.
“Un elemento importante a resaltar es que la sentencia toma en cuenta la violencia sexual vivida por las mujeres en el área Ixil y cómo este delito buscaba evitar la reproducción del pueblo Ixil. La tortura, dolor y terror, afectaron su desarrollo físico y emocional, daño que aún se encuentra vigente y han afectado a los hijos de las víctimas”[1]
Y se reconoció que hubieron varias estrategias de aniquilación a la población ixil por considerarla y declararla “Enemigo interno”.
La Jueza Jazmín Barrios hizo énfasis en que, de esta manera, se estaba ayudando a sanar las heridas del pasado al reconocer la verdad de los hechos sucedidos.
“Este tipo de hechos no deben de volver a repetirse. El pueblo de Guatemala desea vivir en paz”
Al cerrar la audiencia el tribunal de Mayor riesgo esperó a que el acusado fuera trasladado por la policía Nacional Civil a la prisión correspondiente. A las afueras del Palacio de Justicia, varias personas celebraron la sentencia emitida por el Tribunal de Mayor Riesgo A. Lágrimas, alegría, sonrisas, baile, gritos de euforia, era lo que se podía presenciar, después de un proceso que a pesar de los intentos fallidos de parar el debate llegó a su fin.
Las autoridades mayas del pueblo Ixil, junto a hombres y mujeres sobrevivientes, salieron también a dar su saludo y reivindicar el triunfo del pueblo Ixil, triunfo que se extiende a todo el país.
Ana Lainez Herrera expresó:
“Como autoridades ancestrales mayas del Pueblo Ixil, decimos que podemos empezar a creer en la justicia en Guatemala, es histórica esta situación que se ha dado”
“Ya no queremos más genocidio, ni queremos estados de sitio, ni violencia contra nuestros territorios”
“Este es un logro del pueblo Ixil, del pueblo Maya, del pueblo guatemalteco, que se ha logrado, pero también es para que no, nos quedemos callados ante las injusticias, que ocurren, porque sabemos que América Latina también está siendo violentada”
El tribunal de Mayor riesgo A, citó para el día Lunes 13 de mayo para la audiencia de reparación por el daño ocasionado a las víctimas y, para el viernes 17 de mayo a las 15:00 horas en la sede del tribunal, para dar lectura a la sentencia completa.
El 10 de mayo, será recordado para toda la historia, siendo esté el inicio del camino a la verdad, la justicia y la memoria.
Los momentos del día: