¿Por qué tuvo que pasar una década para que el país donde ocurrió esta historia pudiera verla? En el marco de la Muestra de Cine Internacional Memoria, Verdad y Justicia 2025, que este año celebra su 15ª edición del 8 al 18 de mayo, se presentará por primera vez en Guatemala el documental “Carga de Paz”, dirigida por Joey Boink. Este filme retrata desde adentro la gestión de Claudia Paz y Paz como fiscal general. La película, filmada entre 2011 y 2014, permaneció diez años sin poder ser proyectada en su propio país, debido al contexto político, las amenazas y la censura implícita que rodearon su contenido. Hoy, una década después, finalmente encuentra espacio en la pantalla grande y en la memoria colectiva.
Por Nathalie Quan
La memoria como resistencia
La Muestra de Cine Internacional Memoria, Verdad y Justicia es uno de los espacios culturales importantes para reflexionar sobre el pasado, cuestionar el poder y fortalecer la justicia desde el arte en Guatemala. Con funciones en lugares como el Cine Capitol y el Centro Cultural de España en Guatemala, todas las películas van acompañadas de foros de diálogo donde se discute desde la memoria y la resistencia, junto a cineastas, activistas y defensores de derechos humanos. La entrada es libre, con una donación sugerida de Q30 para apoyar la continuidad del proyecto.
La Muestra de Cine está dirigida y organizada por Uli Stelzner, tiene ya 15 años de existir y ocurre no solamente en la capital sino en Quetzaltenango. En esta edición, la muestra alberga un hito simbólico: la proyección de “Carga de Paz”, una película que no solo documenta un período clave de la historia, sino que la confronta. El cineasta holandes Joey Boink, uno de los directores del documental, en una entrevista en línea, compartió detalles inéditos sobre el rodaje, los riesgos y la motivación detrás de esta obra profundamente política y personal.

Justicia filmada, justicia silenciada
Claudia Paz y Paz Bailey es una abogada penalista, doctora en derecho y defensora de derechos humanos guatemalteca. Fue la primera mujer en asumir el cargo como Fiscal General y Jefa del Ministerio Público de Guatemala (2010–2014), y la primera en hacerlo con un enfoque abiertamente comprometido con la lucha contra la impunidad, el crimen organizado y, sobre todo, los crímenes cometidos durante el conflicto armado interno.
Dirigido por Boink y Sander Wirken, Carga de Paz es mucho más que un documental biográfico. Es un seguimiento minucioso durante cinco años —de 2011 a 2014— a la gestión de Claudia Paz y Paz al frente del Ministerio Público. La cámara fue testigo de decisiones clave: la captura de altos mandos militares, la denuncia de redes criminales internas y el histórico juicio por genocidio contra Efraín Ríos Montt.
Boink recuerda cómo lograron ese acceso: “Tomó tiempo. No fue fácil. Tuvimos que construir confianza con Claudia y su entorno durante semanas. Cada día que filmamos era una negociación”. Estuvieron presentes en momentos inéditos, como la detención de Mejía Víctores o las reuniones de alto nivel en el MP, que por primera vez abría sus puertas a una mirada crítica.
Una historia nacida del compromiso y la memoria
Lo que diferencia al documental Carga de Paz no es solo su contenido, sino el lugar desde donde nace. Joey Boink tenía apenas 26 años cuando comenzó este proyecto. Llegó a Guatemala como joven documentalista y politólogo con la convicción de que había una historia que debía contarse.
Durante la entrevista, Boink revela que su motivación está profundamente conectada con su historia familiar. Es descendiente de sobrevivientes del Holocausto. “Mis abuelos fueron asesinados durante la Segunda Guerra Mundial. Mi familia nunca habló mucho, pero con el tiempo se hizo justicia. Cuando vi a los testigos ixiles hablando frente al Estado durante el juicio, entendí que esa posibilidad de hablar era lo más poderoso que podía filmarse”.
La película no fue un encargo. Nació del compromiso y de la urgencia de narrar una verdad incómoda. Esa misma verdad hizo que la película no pudiera proyectarse en Guatemala por una década, mientras su protagonista vivía en el exilio por razones de seguridad —razones que, según Boink, aún persisten.
Perseguir la justicia tiene costo
Durante el mandato de Claudia, se logró una significativa reducción de los índices de violencia homicida y se fortalecieron las capacidades de investigación del Ministerio Público. Pero su gestión marcó un punto de quiebre histórico al llevar a juicio por genocidio al exdictador Efraín Ríos Montt, logrando una condena que luego fue anulada por presiones políticas. Su trabajo también incluyó la investigación de desapariciones forzadas, ejecuciones extrajudiciales, y la depuración interna de estructuras corruptas dentro del propio MP.
Paz y Paz fue blanco de una campaña sistemática de desprestigio: se le acusó de marxista, agente extranjera, incluso de traidora. Se organizó un linchamiento mediático y se sabotearon procesos judiciales clave. El documental muestra su desgaste personal: jornadas interminables, vigilancia, separación familiar. Y finalmente, el exilio. Diez años después, aún no puede regresar al país.
“Ese es un dolor que sigue ahí”, dice Boink. La película se estrena por primera vez en Guatemala, pero su protagonista permanece ausente.

Una película vetada, ahora parte de la muestra de cine
Desde su estreno internacional en 2015 en La Haya, Carga de Paz fue proyectada en más de 50 países y galardonada con múltiples premios. Nunca pudo mostrarse en Guatemala hasta ahora. La Muestra de Cine Memoria Verdad y Justicia 2025 marca un hito al incluirla con funciones en Ciudad de Guatemala y Quetzaltenango.
Uno de los organizadores de la muestra, Uli Stelzer, explica: “Cada año preguntábamos si ya podía mostrarse. Claudia participó en nuestras primeras ediciones. Pero no había condiciones. Este año, por primera vez, logramos hacerlo posible”.
La muestra ofrece un espacio crítico que trasciende la pantalla. “En Guatemala, la impunidad está institucionalizada. No hay televisión pública democrática. El cine independiente es el único medio que nos queda”, agrega Stelzer.
Carga de Paz ha sido reconocida con el Premio del Jurado Joven Europeo – FIPA, Biarritz (2016); Premio del Público – Mittelamerikanisches Filmfestival, Viena (2015); Premio Salvador Allende – Festival des Libertés, Bruselas (2015); documental finalista en la Social Impact Media Awards (2016); obtuvo una nominación en el Golden Calf, Mejor Documental Largo, Netherlands Film Festival (2015); selección oficial en más de 30 festivales internacionales, incluyendo el Human Rights Watch Film Festival y One World.
Una película que aún arde
La proyección de Carga de Paz no es un simple evento cultural. Es un acto político, una deuda pendiente, un reencuentro con la verdad en un país donde recordar cuesta. Es también un testimonio visual que sobrevive al mandato, al exilio y al miedo. Un archivo que cuenta con imágenes reales, lo que muchos intentaron borrar.
Y sobre todo, es una pregunta lanzada al presente: ¿Qué vamos a hacer con la memoria?
El estreno en Guatemala se llevará a cabo el sábado 17 de mayo en Cines Capitol zona 1 a las 20:00 horas, donde Joey Boink estará presente para dialogar con el público sobre la filmación y producción. Y también podrá ser vista en Cinespacio en Xela a las 19:00 horas.
Si deseas saber más sobre la agenda de las actividades de La Muestra de Cine Internacional Memoria, Verdad y Justicia, puedes visitar su página oficial:
https://www.memoriaverdadjusticia.com.gt/programacion