Por medio de un anuncio que circuló en redes sociales, la Dirección General de Correos y Telégrafos hizo un llamado a la nostalgia y la tradición. Al sumar 45 carteros, a la nómina actual, se impulsará el Programa de Recuperación Postal, mediante el cual se intenta devolver el brillo de antaño a este servicio público.
Por Claudia Méndez Villaseñor
La oficina de Recursos Humanos de Correos recibió, este 14 de octubre, más de 50 expedientes de personas interesadas en aplicar a una plaza de cartero, por medio de un contrato 029 (personal temporal) vigente de noviembre a diciembre de 2024. Pese a que el contrato es corto, las 52 personas, la mayoría hombres, se sintieron motivados por la experiencia y guardaron la esperanza de cumplir los requisitos y ser contratados. Los mayores sintieron que era hora de recordar tiempos pasados y los más jóvenes que era el momento de compartir también, con familias y amigos, sobre cartas, sellos y entregas.
Por ejemplo, a José Roberto Herrera, de 66 años, se le iluminaron los enormes ojos claros cuando leyó el anuncio y compartió la noticia con sus amistades. Herrera trabajó en la Dirección General de Correos y Telégrafos por 17 años, de 1979 a 1996, después se jubiló. “Me enteré por redes sociales y decidí traer mi papelería. Conozco el trabajo y conozco la capital”, dijo.
Herrera recordó que comenzó en la Mensajería Nocturna (allí trabajó cuatro años). “No era cartero, pero en Navidad nos pedían apoyo porque se necesita mucha ayuda. Había muchas entregas y tocaba apoyar a los carteros”, mencionó. Así pasaba diciembre, en recorridos por la capital para la entrega de tarjetas navideñas, cartas y paquetes de regalo. “Había mucho que hacer. Por eso conozco las rutas”, añadió.
En 1982, lo trasladaron al departamento de Contabilidad y aun cuando ocupaba un cargo administrativo, siempre ayudó a los carteros cada vez que así lo necesitaran. “En 1993, hubo un excedente de cartas en Navidad y hubo que apoyar la contingencia. Salí a repartir con ellos”, mencionó. “En varios puntos de la ciudad había comités de vecinos y con ellos se dejaba alguna correspondencia. Eran muy responsables con los vecinos. Nunca se perdió nada”, afirmó.
Herrera entregó este lunes 14 de octubre su papelería, en el horario establecido (de 10 a 16 horas). Sostuvo una pequeña entrevista y al salir de la oficina, su rostro se reflejaba entusiasmo y esperanza. “Hay que esperar que me llamen y ver el horario y el sueldo”, añadió.
La relación con los amigos
Herrera contó que compartió el anuncio a sus excompañeros, con quienes mantiene contacto en distintos grupos por WhatsApp. “Envié la convocatoria al grupo de Contabilidad, Certificados y Estafeta, algunos dijeron que no, pero otros si querían presentar papelería”, afirmó.
Como Herrera pagó nómina hasta 1997, sabe que antes de esa fecha, en la Dirección General de Correos y Telégrafos trabajaban más de 400 carteros (y no se daban abasto, según sus palabras). Además, sucursales como La Parroquia, zona 6 y la 25 de junio (12 avenida y 24 calle de la zona 5) contaban con sus propios carteros.
Desde las 8.30 horas, del 14 de octubre, se presentaron al Palacio de Correos los primeros interesados en aplicar a una plaza de cartero. La mayoría, hombres de entre 25 y 35 años. Por el rango de edad, conocieron de cartas y postales manuscritas por la experiencia de familiares de más edad. “No tuve la dicha de recibir una carta escrita a mano, pero mis padres sí. Me motiva la experiencia, pero también la necesidad de un buen empleo”, dijo un hombre joven de 33 años, vecino de la zona 2.
Servicio digno
Javier Lobo, director de Correos y Telégrafos, dijo que con la convocatoria para contratar 45 nuevos carteros (son 14 en la actualidad) arrancó el Proyecto de Recuperación Postal. Se espera que el grupo atienda las 22 zonas de la capital y de municipios como Villa Nueva, Villa Canales, Mixco, Santa Catarina Pinula, San José Pinula y Fraijanes. “Buscamos ampliar y reforzar la cobertura”, indicó.
Para Lobo es importante que los interesados en la plaza se sientan identificados con el trabajo y estén dispuestos a ofrecer un servicio digno y de calidad. Los contratos son temporales, de noviembre a diciembre, y en 2025 se evaluará si renuevan o no, mencionó. “Se cuenta con disponibilidad financiera para hacer los pagos”, afirmó.
Tras recibir los expedientes comenzará un proceso de evaluación para luego hacer las contrataciones, indicó. “Es un servicio de nostalgia, de la vieja tradición, sin embargo ahora lo orientamos a las necesidades del mercado. Contamos con un servicio seguro y certificado”, agregó Lobo.
El servicio postal se ha extendido al interior del país, a excepción de Escuintla, Suchitepéquez, Sololá y Petén. Asimismo, el país recibe correspondencia del exterior, en especial desde Estados Unidos.
En Guatemala, la red de telegrafía dejó de funcionar en 1998, luego de que se concedió el servicio postal a una empresa privada.
