25 de septiembre de 2024
Nicaragüenses exiliados en distintas partes del mundo y organizaciones de la sociedad civil de Nicaragua, agradecemos al presidente Bernardo Arévalo y al canciller Carlos Ramiro Martínez, de Guatemala, por haber hecho posible que 135 compatriotas, presos políticos nicaragüenses, injustamente detenidos en las cárceles de Daniel Ortega y Rosario Murillo, encontraran refugio en ese hermano país.
Este acto de solidaridad de gran relevancia internacional expresa la vocación humanista del actual gobierno de Guatemala y perfila una Centroamérica unida y democrática.
Con nuestro agradecimiento también expresamos nuestra solidaridad con el presidente Arévalo y su gobierno frente a las persistentes tentativas de desestabilización padecidas y nuestro respaldo a los esfuerzos que realizan por la reconstrucción democrática en su país.
Aprovechamos para demandar a toda la comunidad internacional a continuar los esfuerzos indispensables para conseguir la liberación de todas las personas que aún guardan prisión en Nicaragua, algunos en estatus de desaparecidos, defensores de derechos de las comunidades indígenas, de la libertad de expresión y pensamiento, y luchadores por la plena libertad en nuestro país.
Presidente Arévalo, tenga la seguridad que nosotros seguiremos trabajando por alcanzar el sueño compartido de todos los centroamericanos por democracia, justicia social, respeto a los derechos humanos y el fin de la corrupción y la impunidad en nuestros países.