Créditos: David Toro.
Tiempo de lectura: 2 minutos

Por David Toro

29 de agosto 2019

Murphy Paiz, rector de la Universidad de San Carlos (Usac) y el ex rector Estuardo Gálvez son acusados por la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (Cicig), de tener implicación directa en casos de contrataciones anómalas.

La Cicig finalizó su último jueves en Guatemala haciendo públicos varios casos de investigación que están en proceso y que han sido trasladados a la Fiscalía Especial Contra la Impunidad (Feci). De los 10 casos, en dos están involucrados directamente autoridades de la Usac. En el primer caso se indicó que el rector Murphy Paiz, quien fue decano de ingeniería (2005-2015), está relacionado a 68 proyectos anómalos durante ese periodo. 

La Comisión acusó a Paiz porque algunas de las obras que fueron canceladas, nunca fueron construidas. En otros casos el rector eligió el precio más alto y existe la posibilidad de la sobrevaloración de los costos. La Cicig también explicó que existe un grupo de proyectos que no fueron ubicados, porque no se entiende como se realizó el proceso de adjudicación a las empresas y posiblemente estas obras jamás se construyeron.

Uno de los proyectos en concreto expuestos por la Cicig, se trata de la construcción del tercer nivel del edificio T-5 de la facultad de ingeniería. Un proyecto que tuvo un costo de Q923 mil y fue adjudicado a la empresa Construcción, Ingeniería y Proyectos S.A (CIPSA).  Cuando los investigadores de la comisión visitaron el lugar, únicamente encontraron un baño con fugas.

Producto de la investigación la Cicig pidió al Ministerio Público (MP) que se investigue la responsabilidad de Murphy Paiz en estos contratos anómalos y también la responsabilidad de las juntas de licitación. Para la comisión los posibles delitos cometidos son fraude y malversación de fondos públicos.

Caso Rector Gálvez

En este caso, la Cicig señaló al exrector Estuardo Gálvez (2006-2014), quien lideró la adjudicación de cinco proyectos de obra gris y compra de terrenos con anomalías. Gálvez junto al Consejo Superior Universitario (CSJ), habrían adjudicado proyectos a empresas que ofrecían la oferta más cara, según la investigación de la Cicig. Algunas de estas obras ni siquiera terminaron de ser construidas y los contratos sufrieron modificaciones, además se presume que existió sobrevaloración.

Al igual que en el caso del actual rector, Murphy Paiz, la Cicig deja el caso en manos del MP y solicitó que se continúe la investigación para determinar responsabilidades penales.

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